El cálculo es esencial en el entorno global actual porque proporciona las herramientas matemáticas para modelar y optimizar procesos en constante cambio. En lo económico, permite el análisis de mercados financieros, optimización de recursos empresariales y predicción de tendencias; en lo social, es fundamental para el modelado epidemiológico, análisis demográfico y desarrollo de políticas públicas basadas en datos; y en lo personal, sustenta la inteligencia artificial que usamos diariamente, nos ayuda a comprender conceptos financieros como inversiones y seguros, y desarrolla nuestro pensamiento analítico. En un mundo interconectado donde los fenómenos evolucionan continuamente, el cálculo es la base matemática que nos permite entender, predecir y tomar decisiones informadas ante los desafíos globales complejos.